ESCANDAR ALGEET, ALAS DE MAR Y PROSA

Pocas cosas se del poeta Escandar Algeet, la certeza de que es muy joven, de que transita entre la poesía más osada, que habita debajo de un sombrero, que su libro "Alas de mar y prosa" va por la segunda edición, cosa insólita en este mundo, y que sus compradores (as) son como el autor insultantemente jóvenes que desprenden aromas de rebeldia; escasas y a la vez excelentes credenciales para recibir en esta casa al poeta madrileño, que estará acompañado por la editora de Ya lo dijo Casimiro Parker, Isabel Garcia Mellado, si eres joven o tienes alma de joven, si te sientes incomodo con los latazos de determinadas poéticas, ¿porqué no pruebas?
Será el viernes día 1 de Junio a las 20 horas.

Hace siglos que no bostezas


porque tienes miedo de no poder pararlo después,

te integras en dosis camufladas de cotidianidad

y dejas pasar el tiempo

mirando por la ventana,

soñando con suicidios,

imaginando que existen de verdad esas fotos de las postales

aunque tampoco estás tan segura de que sea eso

lo que de verdad quieres.






En este piano de noche suena Galán mientras Carlos fuma impaciente como si alguien fuese a quitar­le el siguiente piti. Mirando para abajo de reojo no sea que alguien se fije en ello. Mirando los rastros de cerveza en la barra y meditando sobre el precio de la tristeza en los buenos momentos. Mirando una vida que no ha sido a palos sino a garrotazos, como el cuadro de Goya, pero con humor negro de fondo, y mucho tabaco. Mezcla ideas de las dos próximas novelas mientras decide la camiseta que se pondrá para la jam del miércoles. Él no se da cuenta porque ya lo sabe, pero no puede dejar de pensar en frases que siempre le conducen a personajes con mucho que ganar y muy poco que perder. Me duelen los dedos cada vez que hablo con él, porque parece que fuese a reventar en mil historias incapaz como es de mantenerse a salvo de la literatura. Escribir duele, por eso me río tanto. Es optimista el cabrón. Y en cierto sentido, reteniendo la labia innata de talento que siempre le acompaña como un aura, se queda callado y bebe cerveza con brusquedad, Gsus entonces entrecierra los ojos observando las paredes del garito y le entra un orgullo acorde con su humildad, traga sa­liva despacio, y empieza a tararear una poesía. Se mira las manos y piensa en la tierra de su tierra y en el barro de su barrio y en todas las guerras y frentes que tiene abiertos, “los llevo bien, tengo fuerzas, y la tengo a ella”. Aunque eso nunca se dice. Son tipos duros bien curtidos y con estilo



CARLOS VITALE y JAVIER LOSTALÉ

Ya os lo podemos confirmar, para el jueves, día 24 a las 20 horas, contaremos con la presencia de dos poetas inmensos, prolíficos, ambos de larga trayectoria literaria, estábamos ansiosos por recibirlos en esta casa, Carlos Vitale, que vendrá a leernos su "Descortesía del suicida", y Javier Lostalé que presentará su último libro, "Rosa y tormenta"
CARLOS VITALE nació en 1953 en Buenos Aires (Argentina). Es Licenciado en Filología hispánica y Filología italiana. Entre otros libros, ha publicado "Unidad de lugar" (Editorial Candaya, Barcelona, 2004) y "Descortesía del suicida" (Editorial Candaya, Barcelona, 2008). Asimismo ha traducido numerosos libros de poetas italianos y catalanes: Dino Campana (Premio de Traducción “Ultimo Novecento”, 1986), Eugenio Montale (Premio de Traducción “Ángel Crespo”, 2006), Giuseppe Ungaretti, Gerardo Vacana, Sergio Corazzini (Premio de Traducción del Ministerio Italiano de Relaciones Exteriores, 2003), Amerigo Iannacone, Umberto Saba (Premio de Traducción “Val di Comino”, 2004), Giuseppe Napolitano, Sandro Penna, Emilio Paolo Taormina, Antoni Clapés, Joan Brossa, Josep-Ramon Bach, etc. Ha participado en festivales, lecturas y encuentros de poesía en Argentina, España, Venezuela, Armenia, Italia, Suiza, Rumania, Estonia, Grecia y Francia. Reside en Barcelona desde 1981.
 
 
ACRÓPOLIS


Despacio.

Seguirá allí

cuando llegues.

A los siglos

no inquieta

tu ascendente

miseria.

Resopla, pues,

y calla.




JAVIER LOSTALÉ. Nació en Madrid en 1942, y tras estudiar Derecho, su vida profesional ha transcurrido en Radio Nacional de España, donde ha presentado el programa cultural EL OJO CRÍTICO, codirigido LA ESTACIÓN AZUL, programa de poesía de Radio Tres, en el que sigue colaborando y, en general, se he dedicado a la promoción de la lectura. Tarea que fue galardonada en 1995 con el Premio Nacional al Fomento de la Lectura a través de los Medios de Comunicación. Hasta el momento ha publicado cinco libros de poemas reunidos en el volumen titulado LA ROSA INCLINADA, publicado por la editorial Calambur, que también ha editado LA ESTACIÓN AZUL, poemas en prosa. También es autor de una antología temática de Vicente Aleixandre, ANTOLOGÍA DEL MAR Y LA NOCHE, y de una antología sobre la Poesía cordobesa del siglo XXI, titulada EDAD, y publicada por la Fundación José Manuel Lara. Pertenece a la Academia Castellano –Leonesa de la Poesía. Es colaborador y crítico de las revistas MERCURIO Y TURIA, y promueve la lectura en institutos y bibliotecas públicas.
 
 
Inédito

La memoria de la tarde

declina en el silencio,

ajeno en su horizonte,

de un olvidado ramo de rosas.

Hay en todo una penumbra triste

que se hunde sin rostro

mientras el corazón escucha

el latido puro de las sombras.

Una nube fija irradia

en lento vaho tu nombre

y toda la habitación se empaña

con su cuerpo transparente.

El tiempo es vuelo sin anuncio

en el que la mirada se pierde

hasta que el pensamiento alumbra

núbil criatura de espuma.

Un advenimiento sin nadie

se consuma entonces en el pecho,

y las lágrimas se nublan

en su hondo cielo sellado.

Una cegada luna
fluye sin hora en la sangre,

mientras la soledad es una estancia

que se va quedando sin aire.

La memoria de la tarde declina

como un labio entreabierto sin beso.

BLAS MUÑOZ Y ELENA TORRES


Dos buenos poetas de casa, acaparadores de numerosos galardones fruto de su buen hacer poético, estarán  el próximo viernes día 18, a las  19,30 horas para leer sus últimos poemas.  Blas Muñoz, ganador el pasado año del V certamen literario de Alfambra con su poema "Dejaré de fumar mañana" y más reciente el prestigioso premio de la Crítica Literaria Valenciana con su poemario "La herida de los días". La mayoría de estos premios han sido publicados en libro. La bibliografía de Blas Muñoz resumida comprende, entre otros, los siguientes títulos, La mirada de Jano, editado por Agua Clara, en Alicante, 2009; El que silba entre las cañas, Ediciones Cardeñoso, Vigo, 2010;  La caracola, también en Ediciones Cardeñoso, 2011; La herida de los días, Gobierno de Aragón, 2011; y Viva ausencia, Diputación Foral de Álava, 2011. Y otros.

Elena Torres, es una referencia en la poesía en esta ciudad, tambien ganadora del IV certamén literario de Alfambra, con su último poemario "Frágil" obtiene el premio "Vicente Gaos" de los Premios "Ciutat de Valencia".

Tiene publicados los siguientes poemarios: Don de la memoria (Valencia, 1994); Ráfagas de vértigo (Valencia, 1997); As de copas (Valencia, 1999. Premio Sargantas de Poesía Chiva 1998); La zona oscura (Valencia, 1999); Alta Fidelidad (Valencia, 2001);En la esquina del desencuentro (Málaga, 2001); Exceso de equipaje (Valencia, 2003. Premio Creación Poética Paiporta); Lencería de piel (Valencia, 2004), Nada Personal (Valencia, 2009) y Alrededor del Deseo (Valencia, 2011), y Fragil 2012
Estarán acompañados de Juan Luis Bedins


LEÓN FÉLIX BATISTA y ANTONIO MENDEZ RUBIO

Una muy buena noticia es saber de la visita a España del poeta Dominicano León Félix Batista, y una suerte el haber conseguido contar con su presencia en Valencia para presentarnos su último libro, "Caducidad",  en la librería Primado, junto a Antonio Méndez Rubio que presentará su "Historia del cielo". Dos grandes poetas acompañados por el chileno Victor Silva Echeto que los presentará.
El miércoles, día 16 a las 19,30 horas.

Podeis leer a continuación la crónica de prensa de la presentación el pasado día 5 de Mayo en la Feria del libro de Santo Domingo de Caducidad,  de León Félix Batista con extractos de las palabras de Eduardo Milán, ambos aparecen en la fotografía.
Santo Domingo, Rep. Dominicana.- La noche de este sábado los salones del Museo de Arte Moderno se llenaron con la exquisitez de la poesía cuando el reconocido Poeta León Félix Batista puso en circulación su más reciente obra, “Caducidad” (Amargord, colección Transatlántica 12, Madrid, 2011). La presentación de la obra estuvo a cargo de Eduardo Milán, quién ponderó las dotes del buen escritor y excelente poeta León Félix Batista, a quien calificó como uno de los mejores de la poesía contemporánea dominicana. Según Milán, su obra es un libro concebido como cuerpo aparte del uso tradicional de la forma desde el pique. Dijo que no hay versificación, puesto que la línea tiende a un “lleno” de la página, que se fractura por la brevedad de esa masa escrita.Expuso que aunque la escritura de “Caducidad” no habilita ningún margen, hace ribera con sus compañeros desbordados. Así, expresó, un libro no está solo, aunque desfonde la forma siempre crea, guía, remite y traza lo que de cierta manera un caracol quiere trazar. Dijo además que la estética del fragmento, recogida por la poesía de ciertas escrituras filosóficas alemanas vinculadas al idealismo tales como Friedrich Schlegel y Novalis, en abierta contradicción a su visión integral mítica, se convirtió en el modo de escritura recurrente para dar un presente en dispersión.En ese sentido, con ello se resalta la importancia del romanticismo y del idealismo alemán, siendo éstas las poéticas divergentes que heredaron los vanguardistas del siglo XX. En “Caducidad”, el escritor capta esa doble articulación: la de que el relato no es incompatible con la revelación del mecanismo. Agregó Milán, que su poesía es un movimiento contagioso de revelaciones que, en un efecto de superficie notable, distrae al lector -lo engaña- retardando un final que no existe, desplazando ese punto de detención última. Todo parece conducir a algo. Pero no conduce a nada. El sentido no es la meta de esta aventura: el sentido es lo que retarda la meta en la medida en que la pierde de vista: "León Félix parece haber descubierto que si hay un programa disolutivo para el cual se organiza un estado de cosas del mundo y esa disolución no se cumple, el mundo restante, el no disuelto, se vuelve una estampida de haces. El futuro no cumplido no se re-pliega, estalla o tiende hacia el costado".“Un ejemplo de esto es el dinosaurio del futuro, que puede derrumbarse hacia el costado sobre una multiplicidad de escarabajos. No como Pedro Páramo sobre sí mismo o cualquier estatua de sal: hacia el costado, lateralmente, tangencial,” sostuvo. Sobre el neobarroco, al cual vinculan a León Félix, afirmó que gracias a Maurizio Medo aquél vuelve por sus fueros como si fuera El jinete pálido o La máscara de la muerte roja. Resaltó en cualquier caso, lo que para él constituyó el neobarroco no puede volver: el neobarroco fue una emergencia de escritura. Y las emergencias no vuelven. Y si vuelven es porque ya no son emergencias. Lo que puede plantearse nuevamente ya no como algo triunfal o vengativo o cabizbajo, esa frente marchita del tango “Volver”, es la habilitación de estados de cosas que precipitan emergencias. Entonces sí, acuérdate del neobarroco. Terminó su presentación afirmando que en León Félix, uno de los mejores escritores y poetas dominicanos, la lógica de cualquier retorno, aunque fuera el retorno de la dispersión legitimada por una forma eterna del fondo de un naufragio, irrumpiría en el curso hipnótico de esa especie de días inventados de “Caducidad”. Además, agregó que tal vez la hipnosis sea lo que señale la trampa del sueño o la visión del sueño como una trampa. Sea como sea, uno entra a esos días de “Caducidad” y siente que no puede salir de ahí. “La caducidad entonces ya no es la caducidad del cuerpo sino la caducidad de lo que el humano crea para conjurar el tiempo y posibilitar un cierto orden de vida, una cierta esperanza que, una vez seguida de otra, arme un tejido que le sirva para concebir lo más parecido a un sentido. Lo que aquí precisamente, por hipersaturación secuencial, se desmantela y salta en sus ejes sucesivos”, expresó. León Felíx deleitó a quienes asistieron a la actividad cultural leyendo trozos de poemas contenidos en la obra presentada. Kayra Ulloa y Héctor Gerardo, prensa CIG 













Hace veinte años Antonio Méndez Rubio recuperaba como cita un verso original de Federico García Lorca, ya utilizado por Blas de Otero, que podría resumir su poética: “pero yo no he venido a ver el cielo”. Desde ahí se constituye esta escritura que va avanzando como una respiración anónima, como la unión casi informe de voces audibles sólo en el poema. Historia del cielo remite entonces a Frankenstein: da señas de su excepcional condición, la condición de un cuerpo quebrado que vive de la incomprensión y de una inocencia surgida del daño. Es fácil recordar aquí las palabras de Mary Shelley cuando su criatura siente que ”las estrellan brillan en el cielo, como burlándose”. Ese cielo siempre está abierto. Y las lecturas, en fin, de Ignacio Escuín Borao, Alberto García Teresa y Pablo López Carballo abren todavía más el sentido del libro, convirtiendo al lector en un autor-actor imprescindible.


Lucía Boscà

Historia del cielo, 2005-2011, establece un diálogo con la antología que recoge el periodo inmediatamente anterior, Historia del daño, selección poética 1990-2005 (Valencia, Germanía, 2006).


JORDI DOCE Y MARTA AGUDO

Para el próximo viernes día 11 a las 20 horas, tendremos a dos poetas convocados hace tiempo y que finalmente pueden asistir a la cita con Primado, Jordi Doce, que nos leerá su libro Perros en la playa, y Marta Agudo que lo hará con 28010.

Jodi Doce, es doctor en letras por la Universidad inglesa de Sheffield, donde fue lector de español entre 1993 y 1995, puesto que volvió a ocupar en la Universidad de Oxford entre 1997 y 2000. Su tesis versó sobre el influjo del romanticismo inglés en la poesía española contemporánea.
Con el poeta canario Francisco León codirigió brevemente (entre 2005 y 2006) las colecciones niké y /clásica de Artemisa Ediciones, donde destacan sus traducciones de la poesía de William Blake. Con Andrés Sánchez Robayna coordinó en 2005 el volumen de ensayos críticos Poesía hispánica contemporánea (Círculo de Lectores / Galaxia Gutenberg).
Incluido en las antologías La otra joven poesía española (ed. Alejandro Krawietz y Francisco León, Igitur, 2003), Campo abierto. Antología del poema en prosa en España (ed. Marta Agudo y C. J. Arribas, DVD Ediciones, 2005), Última poesía española (1990-2005) (ed. Rafael Morales Barba, Marenostrum, 2007) y Las moradas del verbo. Los poetas de la democracia (ed. Ángel Luis Prieto de Paula, Calambur, 2010), ha colaborado con ensayos, traducciones y reseñas en Cuadernos Hispanoamericanos, Quimera, Clarín y Solaria, entre otras revistas. También ha escrito textos de acompañamiento para libros de John Ashbery, Joseph Conrad & Ford Madox Ford, Olvido García Valdés, William Hazlitt, Eduardo Moga, Eduardo Scala y Álvaro Valverde, entre otros, así como de Melquiades Álvarez (pintor) (Caminos).

Ha preparado ediciones bilingües de la poesía de W. H. Auden, Paul Auster, William Blake, John Burnside, Anne Carson, T. S. Eliot, Reginald Gibbons, Ted Hughes, Geoffrey Hill, Peter Redgrove, Charles Simic y Charles Tomlinson, así como de varios libros en prosa de Thomas de Quincey.
 
La luz de media tarde entre la hiedra,


la lumbre inextinguible de algún sueño,

el niño que se ahoga de risa en su columpio,

el temblor repentino de tus muslos,

el calor que insinúan tus mejillas

al despertarte embriagada de sueño,

respirar el vaho gris de la escarcha,

jugar al abandono en estas calles

donde la claridad nos perfila extranjeros,

el cielo como un largo balbuceo de azul,

las tormentas de julio, tan veloces,

el aroma dulzón del descampado…

Cuánto nos pertenece, sin que importe escribirlo.
 
 
 
 
 
 
 
Por su parte Marta Agudo con 28010 (Calambur, 2011), Marta Agudo fundamenta el decir poético como código que domicilia la identidad en el mundo y cuestiona su dirección a partir del lenguaje, que aquí se revela materia maleable y corregible. Con este poema, la poeta construye su tiempo, su geografía a la vez que se reconstruye a sí misma como voz en un paisaje donde «la luz fracasa».

Juan Luis Panero suele afirmar que en estos tiempos que corren, el problema de muchos poetas, por no decir de la mayoría, es que no piensan. «Escriben versos, pero no piensan», dice. No es el caso de Marta Agudo, quien en 28010 no sólo piensa sino que hace de su pensamiento el móvil de una corrección, de una recreación que, desde el primer latido de la palabra, la devuelve al mundo. A la realidad perceptible del mundo. Partiendo de la idea de que la verdadera patria del hombre es el idioma, MA tiene la voluntad de hacer desaparecer todo vestigio de identidad individual, conduciendo condición temporal hacia el sumidero del yo, para descubrirse, sentirse libre, inocente -...en la explanada de la palma poder sembrar carteles, opúsculos, las cadencias de mi sintaxis o la precocidad de un niño...- y viva.


 ¿Qué fue primero, el nombre o el verbo? se pregunta MA y sobre esa incertidumbre levanta su poema como una desesperada voz, como una argamasa que pretende cubrir las junturas dúctiles, pero también las fracturas y contradicciones de una lengua, que es yo, carne consciente inferida de tiempo. Formulación de una sintaxis dislocada que se balancea con temerosa cadencia al borde del abismo. Una sintaxis ante el espacio que le revela su verdadera escala y su finitud.

Entonces ¿hacia dónde trazar la fuga? Quizás la salvación está en los otros, pero al cabo comprende que en el signo «más» donde el conflicto y sobreviene la parálisis y la certidumbre de no hay rumbos ni decisiones...sintaxis de los prodigios, la relación del yo con sus restantes. Se desgastan las aceras y plagas acorraladas, infecciones aún por explorar, avalancha de vidas que sustentan el engranaje de este mecano de hombres bruscamente verdaderos. Milagro o astucia, ignoro las reglas y voy dando tumbos hasta casa. Cuando llegue patios abandonadas, memorias de oscuros exterminios, aunque, paredes adentro, hexágonos de miel. Este poema sintetiza magistralmente no sólo el sentido del libro, sino, sobre todo, ese estado del vivir con un radical sentimiento de extranjeridad existencial que prolonga en la modernidad una tradición poética enraizada tanto en los poetas bíblicos de Sabiduría o el Eclesiastés, como en los poetas sufíes o los místicos españoles. Aunque, a diferencia de aquéllos, el creador de MA ha sido despojado de su divinidad y se lo percibe luchando por corregir las torpezas sintácticas de su lengua.
 
 
 

PRESENTACIONES 5 DE MAYO, EN FERIA DEL LIBRO

Este año en la fira del llibre de Valencia, la librería Primado ha organizado varias actividades, concluye con dos nuevas convocatorias a realizar el próximo sábado día 5 mañana y tarde:


día 5, sábado a las 11 horas, sala audiovisuales

Presentación de la novela:


El misterioso caso de la peste negra,



con el autor Eduard Mira, acompañado de Rafael Beltran, catedrático de la U.V. y Miguel Morata





día 5, sábado 19,30 horas, sala 2 del museo.

Presentación del libro, y recital: "Por donde pasa la poesía"  

Coordina ambos actos Jesús Ge, que presenta junto a Enrique Falcón y Miguel Morata.

Aprovecharemos la presentación, para hacer entrega pública a la representante de la APFG, (Association pour la Promotion Fémenine de Gaoua) de la primera aportación a cuenta de los derechos de autor, que generosamente los participantes convinieron en renunciar y hacer a favor de dicha organización

Y luego, intervención poética plural y popular a pie de calle en la misma escalera de entrada al museo con: Enrique Falcón, Laura Giordani, Arturo Borra, Mar Benegas, Jesús Ge, Jorge Brunete, Enrique Martín Corrales, Poetiks, Antonio Martinez i Ferrer, algunos más que se nos olvidan y tod@s aquell@s que tengan algo que decir.


Os espero, salud y cultura.